jueves, 22 de agosto de 2013

poema.

En la calle, el tiempo de los hombres se mide con ventanas
maderas de ayer y ladrillo
con la sombra de piedra que se alarga
cuando el día va escalando su cúspide.
Guardan todos un pájaro en el pecho;
sintiéndose jaula y enjaulados
al regreso, sus casas
su recuerdo, su estadía.
Si este es un poema, lo es de pájaros;
en los hombres, encerrados
en sus pechos, en la calle, en sus casas.
Pájaros sin alas,
los pájaros cautivos de los hombres.

6 comentarios:

  1. yo siento que tengo un pàjaro en el pecho, que aletea pero no puede salir, me gusto lo del pajaro en el pecho

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    1. ahora el pájaro salió y me llevó, viajamos por el cielo entre las nubes y ya no veo las cosas desde el suelo

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  2. Lo degusté mucho, y sentí y me sentí un pájaro.

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    1. deberías entonces dibujarte unas alas enooormes para volar, para enseñarme y para poder hacerlo juntos

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    2. Ya las empecé a dibujar, poquito después de conocerte. Pero las quiero muy muy enormes, para llevarte conmigo tan lejos como quieras.

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